Azotea Motherboard
- Sr. Morga
- 23 oct 2021
- 1 Min. de lectura
Aquí un pequeño experimento que hice hace ocho años...
La historia de una simbiosis, una madre y su energía desprendida al que llama hijo.
Aquel objeto que manteníamos en el viaje onírico, que al despertar buscamos por toda la llanura de las sabanas de la cama y ya no está.
La madre desesperada mira al horizonte, tratando de quebrantar su dolor.
El álveo de sus lagrimas destrozando a la gran madre, después de que su control remoto fuera apagado involuntariamente.
El fiel guardián, inmortalizado en su propia lucha.
Sonreía lentamente, mientras miraba aquella escena que por dentro le creaba enojo y placer a la vez.
El refrendador mirando las nubes, haciendo caso omiso ante el "electrocanibalismo" suscitado unos metros, el hijo trató de regresar al vientre de su madre, pero en su lugar solo la devoró.
La mujer dio a luz a una energía electromagnética, pero la nueva vida se negó a la realidad queriendo regresar al vientre de su madre con todos sus sueños en la mano.
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